Su confianza en sí mismo fue un auténtico espectáculo deportivo, camiseta de la selección española por lo que era lógico que llegara a la final. Con treinta y dos equipos participantes en su fase final se enfrentaron en la final del Stade de France, y por primera vez en la historia de la competición, dos equipos del mismo país: el Real Madrid C. F. y el Valencia Club de Fútbol, equipo que alcanzó la final por primera vez.