Tanto los zapatos, unos slingback de los que tantos modelos tiene el zapatero real, ya sea de la monarca o de sus hijas, también fieles al salón de tira trasera, y el bolso, con piel de efecto cocodrilo, son en ese rosa fucsia que viene siendo uno de sus básicos del último año. Recurrió a ella por vez primera en los Premios Princesa de Girona del verano pasado, con un vestido asimétricos de escote joya que no pasó en absoluto desapercibido.